El Sevilla de Marcelino, si entrenara igual que habla en rueda de prensa nos iría mejor, sigue a la deriva, con cinco jornadas sin ganar, perdiendo dos partidos consecutivos en el Sánchez Pizjuán y lo que es peor, sin atisbo de mejoría, al contrario un equipo en claro retroceso que no ataca bien, que no sabe defender, que no tiene intensidad, que nunca tiene la pelota y que roba cero balones al equipo rival, asi que es algo lógico que el equipo no le gane a nadie.
Todo lo contrario que el Athletic de Bielsa, un equipo con las ideas claras y que sale a todos los campos a jugar su futbol, presión asfixiante desde arriba, intensidad durante 90 minutos, posesión de balón, futbol de ataque... lo que todo sevillista quiere y desea para su equipo. Algo que José María Del Nido, uno de los culpables de que el Sevilla no juegue así porque descartó a ultima hora al loco cuando el estaba loco por traerlo, pudo observar desde su sillón en el palco, el Presidente pudo ver in situ como el Athletic de aquel loco argentino que tanto deseaba, paseaba la pelota sobre el campo de ese equipo que el ha creado, sin querer hacerle sangre y perdonándole lo que pudo ser una goleada.
Del Nido, me tenés loco, otra vez te equivocaste boludo... Intentaste quitarle mérito a principio de temporada a Bielsa, aprovechando el titubeante comienzo de liga del cuadro vasco cuando dijiste aquello de: "no se que habría sido del Sevilla si lo condujera Bielsa", imagino que despues de haber escuchado los silbidos con los que la afición despidió al equipo y al entrenador y visto lo que viste en el cesped ya sabrás que habría sido del Sevilla si lo condujera Bielsa. Y la culpa de eso solo la tiene usted José María, porque en la previa del partido de ayer, Marcelo Bielsa se encargó de aclarar algo que ya todos sabíamos, que usted rechazó al técnico: "el Sevilla rechazó en su momento la opción que yo representaba. Tal vez mi perfil no coincidía con la convicción que la institución entendía necesaria, en cuanto a la solidez defensiva, los riesgos que se toman... En el club hay gente que conoce muy bien a su equipo y la liga. Han tenido años de mucho valor futbolístico, de modo que veo lógica la posición que expresaron y la respeto", estas son las palabras de Bielsa explicando porque no está ahora sentado en el banquillo de Nervión, para mear y no echar ni gota José María.
Centrémonos ya en el partido y en el meneo que le dió el Athletic al Sevilla en todos los sentidos. Marcelino sacó su ya clásico y cada vez menos efectivo 4-2-4, con un único plan, dar la pelota al rival, esperar detras y salir a la contra por las bandas con Navas y Perotti, viendo que la cosa desde el principio no funcionaba, fué Kanoute el que dándose cuenta de la pelicula, bajaba al centro del campo a poner un poco de juego y de criterio al ataque sevillista, algo que consiguió en algunas fases de la primera parte, en la segunda intentó hacer lo mismo, pero ya no pudo, el loco Bielsa mandó a Javi Martinez a seguir al malí cada vez que este bajara al medio a por la pelota y ahí acabó por terminar de asfixiar al Sevilla.
Por su parte Bielsa, sorprendió con la alineación, al principio y sobre el papel, parecía que sería defensivo y que jugaría con cinco defensas, pero no fué así, era un sistema flexible debido a la movilidad de sus jugadores, hubo momento para todo, para el 5-4-1, para el 3-5-2, para el 4-3-3 y lo que mas me llamó la atención es que era con una naturalidad asombrosa, algo que se consigue solo a base de entrenar, entrenar y entrenar. La idea de Bielsa era clara, intensidad desde el principio, mucha presión en campo del Sevilla y cuando se recuperaba la bola, muy fácil por cierto, tocar y tocar y velocidad arriba.
El partido comenzó como se esperaba, el Sevilla arropadito esperando la contra y un Athletic que desde el minuto 1 salió a comerse al rival, fruto de esa ambición, a los 5 minutos el cuadro vasco se ponía por delante en el marcador, en una falta lateral que bota Ander Herrera, Negredo hace algo que nunca se debe hacer y te lo enseñan en alevines, despeja una pelota que se va fuera al borde del área y allí Iraola solo, conecta un derechazo soberbio que se cuela dando en el palo de la portería de Varas, 0-1 y la cosa empezaba a pintar muy mal. Cuando peor estaba la cosa, con 0-1 y con un dominio del Athletic era abrumador, cuando el publico empezaba a impacientarse y se escucharon algunos tímidos silbidos, Kanoute prolonga con la cabeza una pelota a Jesus Navas, que lo deja solo dentro del área, el palaciego la cruza a la perfección y bate a Iraizoz, era el minuto 14 y el Sevilla empataba el partido. La afición se vino arriba, esperanzada en darle un giro al partido y se volcó con el equipo intentando aprovechar el viento a favor del gol, pero no... el Sevilla no respondía, la realidad fué distinta y el equipo seguía timorato, ademas, el Athletic en lugar de agobiarse se dedicó a tocar la pelota, a crear espacios, a labrar un futbol tranquilo y preciso que incluso terminó adormeciendo el ímpetu de la grada, ese futbol le hizo al Athletic generar numerosas ocasiones de gol, una de Muniaín que saca Navarro, otra en una falta de Iñigo Perez, partidazo el suyo, que saca Varas, otro disparo de Ander Herrera que sale lamiendo el poste y otra de Iraola que mandó fuera despues de hacerse un lío. Al Sevilla se le veía agobiado, sin saber como quitarse de encima la presión del equipo bilbaíno, en dos contras tuvo Negredo el gol, en un mal cabezazo a pase de Navas y en una gran jugada personal que termina en un buen disparo raso que saca Iraizoz junto a la cepa del palo, ahí se llegó al descanso.
La segunda parte varió poco de la primera, lo único variable fué que el dominio del Athletic era mayor que en la primera, la filosofía de Bielsa de tocar y tocar ha cuajado en el Athletic, el cuadro vasco tocaba y creaba ante un Sevilla plano, sin ideas y que estaba a merced de los bilbaínos. El cuadro de Bielsa nunca renuncia al trato del balón, fruto de esas buenas combinaciones en el centro del campo generó una de las mejores ocasiones del partido, así, en una de esas jugadas elaboradas al primer toque, Muniaín mete un balón interior a Llorente, este le da el pase de la muerte a Ander Herrera y Spahic saca la bola de debajo de los palos, era el minuto 68, se olía ya el gol vasco y no tardó en llegar, tres minutos despues, llegaría el segundo gol de los bilbaínos, fallos en cadena de Escudé y sobre todo de Spahic que al intentar despejar la pelota la deja a los pies de Muniaín, este se la cede a De Marcos y lo deja solo delante de Varas, despues de rebotar la pelota en el de Pino Montano y con un poco de suerte la pelota se le queda a De Marcos solo para empujarla, minuto 71 y el Athletic de forma justa se pone por delante. De ahí al final solo quedó un equipo sobre el terreno de juego, maravilloso el juego de los vascos que campaban a sus anchas sobre el césped mientras los jugadores sevillistas, sin sangre, lo único que hacían era mirar y mirar como los que ayer vestían de verde se pasaban la pelota unos a otros. El enfado de la afición cada vez iba a mas, llamó mucho la atención como en el minuto 40 y perdiendo solo por un gol el estadio estaba medio vacío, la confianza viendo el partido en el Sevilla era 0 por parte de la grada. El Athletic viendo el pelele que tenía enfrente se gustaba, las diabluras de los pequeñoa vascos eran continuas y su futbol vistoso y fluido, por ponerle un pero, para mi le faltó profundidad y hambre de matar el partido, aún así tuvo varias ocasiones de gol, una de Gabilondo que cuando estaba solo se tropieza en el área y otra de Muniaín en un mano a mano con Varas. Ahí el partido llegó a su fin, con música de viento en la grada para despedir al Sevilla y con un auténtico meneo futbolístico durante 93 minutos del que pudo y debió estar aquí, Bielsa, al que está y cada vez mas se le está cayendo el equipo y las ideas, Marcelino.
2 comentarios:
No creo que se pueda decir que si Bielsa hubiera venido aquí, haríamos bordado el fútbol. Hay muchas experiencias de entrenadores, que triunfan en un sitio y luego van a otro y fracasan (me acuerdo ahora de Valverde en el Villarreal).Lo que ocurre con los jugadores, es igual o peor.
No me quiero ni imaginar que se hubiera dicho, por parte de algunos sevillistas, si el Sevilla con Bielsa, hubiera empezao la temporada igual que el Athletic, en puestos de descenso, ¿se habría tenido paciencia?. Bielsa quería venir aquí, y mandar como el que más, con unas exigencias, exageradas a mi modo de ver. Nunca me gustó hablar de "fútbol ficción".
Raul si hay algo que tengo que decir en favor de nuestro mister es que este equipo estaba en descomposición y lo está teniendo él que ir haciendo poco a poco,en cambio el Bilbao estaba hecho,un bloque que dejó Don Joaquín Caparrós Camino solo para que luego llegara otro y le diera su toque personal,lo mismo que dejó a nuestro Sevilla en manos del tal Juande,lo de ayer fué todo un baño,pero hay que ver las cosas desde muchas vertientes,un abrazo hermano y salud sevillista,a ver si el enfermo empieza a remontar,de momento está en observación y hay que ver resultados de las analiticas.
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