Ánimos arriba

Tres días despues del descalabro europeo ante el Hannover el Sevilla de Marcelino debuta en liga ante el petro Málaga. Han sido tres días duros para el sevillismo, para mi en particular tambien, tenía el ánimo por los suelos, no confiaba en nada ni en nadie del Sevilla, estaba hundido deportivamente hablando, todo lo veía negro, lo que hace diez días era ilusión de cara a la nueva temporada se convirtió en desilusión la trágica noche del Hannover 96, pero ayer recibí un correo de una gran amiga que, como si de un ángel de la guarda se tratara, me levantó el ánimo, me abrió los ojos y me hizo recapacitar ya que nuestro escudo y nuestros colores están muy por encima de quien los representa, me levantó el ánimo y volvió a salir el sevillista que llevo dentro. Mi amiga Belceli me mandó ayer este poema que es el que me hizo recobrar la ilusión de un sentimiento, espero que os guste y que sintáis lo mismo que sentí yo la primera vez que lo leí:

TENGO DOS COLORES CLAVADOS EN EL PECHO

Nunca dejé de creer en ti,
ni cuando todo parecía perdido,
nunca dejé mi afición a ti,
y menos por un mal día,
nunca me voy a callar,
ni cuando la angustia en mi corazón es grande,
nunca, jamás, te dejaré solo, Sevilla.
Se que nada podrá con nosotros
tengo clavados en el pecho y en el alma
dos colores que idolatro,
estoy contigo, Sevilla,
y siempre lo estaré.
¿Lágrimas?, solo de alegría,
¿sonrisas?, por ti, siempre la mas grande.
Te sigo amando, idolatrando y adorando,
donde yo voy,
tu vienes conmigo, Sevilla,
tu camiseta,
es la armadura mas fuerte que tengo,
es la fuerza que me motiva,
que me hace creer en ti,
por esa camiseta,
por ese escudo,
por toda tu historia,
yo te quiero, Sevilla,
soy apasionada tuya,
nunca dejé de amarte,
ni cuando la pelota no entró,
nunca sería capaz de negarte mi apoyo,
mi Sevilla querido,
hasta la muerte te amaré,
hasta la muerte te seguiré,
nunca nos rendiremos,
¡¡¡Sevillaaaaaaa...!!!
seguro que tiempos mejores nos dará.